domingo, 29 de noviembre de 2015

Deportista Paralímpico


Cuando alguien descubre qué es exactamente un deportista paralímpico, a lo que se dedica y sus logros, su reacción puede ser de dos tipos: admiración porque se trata de una persona fuera de lo común, que hace algo escandalosamente grande, un “crack”. O por lo contrario puede pensar que todos los logros deportivos los ha conseguido únicamente por su condición de paralímpico, porque ahí no hay competencia y que en condiciones normales no sería nadie deportivamente.

Ambos pensamientos tienen una parte cierta y otra de desconocimiento. Incluso me atrevería a decir que tienen conexión entre ellos. Quizás yo no sea la persona más apropiada para hablar acerca del deporte paralímpico, ya que esta temporada que vamos a empezar va a ser mi tercera como tal. Pero esa fase que he vivido, de pasar del deporte convencional (me niego a decir “válidos”) al deporte adaptado, me da un punto de vista diferente.

No es que seamos unos fuera de serie, ni ejemplos de superación, pero os puedo asegurar que el simple hecho de “ir a entrenar” no es lo mismo cuando tienes algún condicionante tan grande como que te falte una pierna, un brazo, vas en silla de ruedas o te falta un sentido. Estas cosas son las que no se ven cuando un paralímpico sube a un pódium en un campeonato del Mundo de lo que sea. Nos quedamos en que es un “crack” porque ha ganado aun faltándole lo que sea o por lo contrario que ha ganado porque en total compiten 10.

No es mentira que en nuestras competiciones la participación no es muy grande. En muchos campeonatos hay categorías donde, o no compite nadie, o hay únicamente uno. Nosotros somos los primeros que no nos gusta competir solos, ya no es una competición. Pero también sabemos por qué ocurre esto. La dificultad antes citada para poder entrenar o la inexistencia de premios económicos en nuestras competiciones, esa sensación de estar continuamente remando a contracorriente, hace que el porcentaje de deportistas paralímpicos sobre la población que puede serlo (gente con discapacidad) sea baja. Y muy pocos de pocos da esto como resultado, campeonatos del Mundo unipersonales.

Personalmente me quedo con una definición para los deportistas paralímpicos: rebeldes. Personas que decidieron no bajar los brazos con sus condiciones y que avanzaron por el camino de la lucha constante, persiguiendo sus sueños que no son otros que vivir la vida, esa que sólo vivimos una vez, al 110%. Pero decidme, tiene esto algo que ver con el deporte? ;)


viernes, 13 de noviembre de 2015

Gracias por esta temporada


En breve empieza la nueva temporada, pero antes de empezar y publicar muchas de las novedades para este próximo año, toca agradecer a todos los que han estado a nuestro lado y nos han acompañado en este intenso y emocionante viaje.

Nuestro principal patrocinador ha sido el ayuntamiento de Serra, mi pueblo.  Llevar el escudo en el mono ha sido una responsabilidad y un orgullo. Espero que Serra sea un poco más conocida en el mundo del triatlón.


Una de las claves de esta temporada ha sido la prevención de lesiones. Esto es gracias a las manos de Manuel Lujan (Fisiolujan). Seriedad, buen trabajo y compromiso.

Hemos sido muy afortunados de contar con el mejor mecánico de Valencia: Bicicletas Lluch, en la Pobla de Farnals. La persona más trabajadora y que mejor ajusta el cambio que he conocido.



Los primeros que apostaron por nosotros y decidieron sumarse al proyecto fueron 42k running. Os invito a conocer sus camisetas tope de gama, mejor incluso que otras grandes marcas.

Otras empresas e instituciones también nos han echado una mano: ONCE Valencia, Pilar Brisson, Club de Campo "La Carrasca", Triesport Roquette y CEA Bétera.


Y por supuesto todo el equipo humano que tengo detrás. Sin ellos sería imposible (de verdad). Roberto a la cabeza, aguantándome durante todo el año, sacrificando su temporada y entrenamientos. Ana, que me hace sufrir con sus entrenamientos, pero que ha conseguido sacar petróleo de donde no había nada. Mi familia, con mi padre, madre, hermano y tío a la cabeza. Sin olvidarme de mi abuelo, el cual nos dejó hace nada, pero que seguirá siendo un pilar fundamental. Y tanta gente que no aparece en redes sociales pero gracias a ellos he podido hacer cosas tan simples como ir a la piscina y tener una vida algo más normal. Repito, imposible sin su ayuda. Entro todos hemos hecho un mecanismo perfecto, que seguirá moviéndose.